Lo hemos comentado en muchas ocasiones, pero vale la pena reiterarlo ante la cercanía, ya, de la jornada electoral.
Me refiero a la incongruencia del candidato presidencial de Morena, Andrés Manuel López Obrador y su deseo, ambición, capricho, obsesión o lo como usted quiera llamarle, de ser Presidente de México.
Vea usted, amable lector, si no…
Si un intelectual no habla bien de él, es un ignorante y un pésimo profesionista.
Si un artista dice que no va a votar por él, entonces lo califican de “televiso”, de malo, de bajo perfil intelectual, de tonto y de ignorante.
Si un empresario señala que no simpatiza con él, entonces es corrupto, favorecido y miembro de la mafia del poder.
Si un periodista lo critica o lo cuestiona, entonces es “chayotero”, empleado del PRIAN, poco objetivo o de plano “seudoperiodista”.
Si un político lo critica, entonces es de la mafia del poder, que está nervioso porque va a perder los privilegios que tiene y además que es corrupto y que no está de lado del “pueblo”.
Si un ciudadano cualquiera señala que no va a votar por él, entonces es traidor a la patria, pendejo y que lo compran con tortas y frutsis.
En cambio…
Si un intelectual habla bien de él, es un gran artista y exponente, orgullo de los mexicanos, pero sobre todo, del pueblo bueno.
Si un artista dice que va a votar por él, entonces es inteligente, demócrata, digno de ser halagado y además hasta lo proponen para algún cargo público.
Si un empresario señala que simpatiza con él, lo califican de un empleador comprometido con el desarrollo de México.
Si un periodista lo llena de elogios o lo defiende de una crítica, entonces, es un objetivo, imparcial, honesto, trabajador y comprometido con el futuro de México.
Si un político está con él o decide cambiarse con él, lo perdonan y lo consideran patriótico.
Si un ciudadano está con él, entonces es un patriota.
¿De verdad eso queremos para el país?
EN CORTO
UNO.- En el estado de Morelos el candidato Cuauhtémoc Blanco lleva la delantera, según las encuestas, para la gubernatura. En esa entidad llevan 18 años de pésimos gobernantes y la gente, por lo que se ve, no ha aprendido la lección. Lo es estar “bendecido” por el “Mesías”.
DOS.- Ningún candidato a la alcaldía de Victoria ha tocado el tema hidráulico para la ciudad. Y es que no es posible que nomás lleguen las “benditas” lluvias y las calles se vuelvan todo un caos. Es cierto, la basura tiene mucho que ver, pero también la falta de drenes pluviales.
TRES.- Y de los candidatos al Senado ya se sabe poco, como que en vez de apretar el paso en los últimos días de campaña, le aflojaron. Ya ni me acuerdo de siete de los diez candidatos.
PREGUNTAS
¿Cómo definiría en una palabra el actual proceso electoral? Yo: sucio.
DIMES Y DIRETES
“Creo que no es bueno para la sociedad, estar debate y debate”: El candidato Xicoténcatl. No, si estamos ante un gran estadista.
Políticos en la red: @EPN: “Tenemos puesta en ustedes la esperanza de que el nombre de @mexico habrá de lucir y habrá de brillar. Confiamos plenamente en ustedes. ¡Mucho éxito a @miseleccionmx en #Rusia2018! #VamosMéxico”.
EN CINCO PALABRAS: Ya mero se acaba esto.
PUNTO FINAL.- Simplemente hay candidatos que valen la pena y otros que nomás dan pena.
Twitter: @Mauri_Zapata
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